Un proyecto que dignifica la vida de estos nobles animales y nos alerta para que los cuidemos y evitemos su extinción.
Primer Santuario para Burros de América
Según un conteo de burros realizado en 1991, en México existían 1,500,000 burros. Se estima que actualmente sólo quedan 300,000, es decir que las 3/4 partes de la población de burros en México desapareció en 25 años.
En 2006 se creó el Primer Santuario para Burros de América, llamado «Burrolandia México A.C». Allí viven 38 burros que llegaron rescatados del maltrato o donados por particulares que no pueden mantenerlos. El espacio físico donde fueron ubicados corresponde a una ex hacienda de la población de Otumba en el Estado de México.
Al visitar Burrolandia podrás conocer al burrito desde su origen y domesticación hasta nuestros días; aprenderás los tipos de burros que existen y su utilización como bestias de carga. Además los guías te contarán la historia y tradición del pueblo de Otumba.
El acceso a Burrolandia tiene un donativo de admisión de 50 pesos por persona con el que contribuyes a sustentar este proyecto y que los burritos tengan un hogar y quien los cuide.
Funciones del burro
Con la llegada de los españoles a México, llegaron también algunos animales domésticos como el cerdo, la oveja y el burro. Y se conocieron los avances tecnológicos como la industrialización del acero y la rueda, que, combinados dieron por resultado la fabricación de carruajes y carretas. En el pueblo azteca los encargados de transportar mercancías eran los hombres llamados «tamemes»* recorriendo aproximadamente 21 km por día con 23 kg de peso. Con la llegada del burro se le dio el uso de bestia de carga y tiro ya que se obtenía un considerable beneficio para el traslado de personas y mercancías.
Un burro tiene la capacidad de cargar mediante un carro de tiro alrededor de 350 kg por una distancia mayor a la de los «tamemes» sustituyendo la función de 15 hombres. Los burros fueron durante muchos años de gran ayuda en la construcción y en el transporte en general. Afortunadamente hoy en día los animales fueron reemplazados por vehículos automotores.
* Hay una película mexicana que se llama «La carga» (está en Netflix) donde puedes conocer más acerca de los tamemes.
La visita a Burrolandia
Me hacía muchísima ilusión visitar Burrolandia y salí de allí muy feliz. Cuando llegas te dan un par de orejas para que las lleves durante toda la visita.
Fueron momentos muy bonitos de convivencia con los burritos, les puedes dar de comer, los puedes acariciar, te cuentan la historia de algunos de ellos, como por ejemplo, la historia de Florindo quien llegó al santuario con su dueño, un señor mayor al que le preguntaron «¿Cómo se llama?» y el señor respondió «Florindo», pensando que le preguntaban a él cuando en realidad le preguntaron como se llama el burro. Y así, como consecuencia de ese malentendido, llamaron Florindo al burrito.
Filemón, fue toda una estrella de cine ya que fue el burro de la película de la India María que se filmó en Otumba «Tonta, tonta pero no tanto».
Y por supuesto están los que llegaron lastimados, como Roberto, el burro ropavejero atropellado por un autobús y que, luego de su rehabilitación, llegó a Burrolandia. O Copo de Nieve que fue rescatado después del ataque de varios perros callejeros y como secuela le quedó una de sus patitas chuecas.
Todos los burritos que ingresan a Burrolandia dejan atrás su pasado y empiezan una nueva vida de seguridad, tranquilidad y amor.
TIP: Si vas de lunes a viernes es muy probable que tengas el santuario sólo para ti. Si vas en fin de semana habrá más gente pero puedes pasear en trencito, habrá actividades en el cine del burro, competencias y karaoke y convivencia con los burritos no sólo en el área de la pradera.
Ayuda a los burritos
Si quieres contribuir a esta noble causa puedes hacer donativos de pacas de alfalfa que venden en las forrajeras de la zona.
Te paso el dato de donde yo las compré: Tlapalería La Chikita, viniendo de las pirámides de Teotihuacán hacia Otumba a mano derecha vas a ver las pacas. Yo compré 2 pacas de avena y alfalfa y a los burritos les encantó (las puedes ver en el video pues las fuimos repartiendo durante todo el recorrido).
Cómo llegar a Burrolandia
Desde Puebla por Arco Norte, una hora y media. Es como ir a las Pirámides de Teotihuacan, de hecho puedes hacer una escapada que incluya la visita a la Zona Arqueológica. Tomas la México-Puebla, pasas por la caseta de San Martín, te incorporas al Arco Norte hasta la salida a Otumba, si vas a Teotihuacan, salida por la carretera 132D.
Desde Puebla en Autobuses Teotihuacan. Salen desde la Central de Autobuses Puebla ubicada en Blvd Carmen Serdán 1999. Y en Otumba la terminal está ubicada a 10 metros de la entrada a este municipio.
Desde CDMX, son 60 km por la carretera 132D.
Desde CDMX en Autobuses Teotihuacan saliendo desde la Central Norte. Taquilla en andén 7.
Puedes visitar Burrolandia de lunes a domingo de 9 de la mañana a 6 de tarde. La entrada a Burrolandia México corresponde a un donativo económico por persona, de $80.00 (ochenta pesos 00/100 m.n.) para niños (menores de 18 años), y de $100.00 (cien pesos 00/100 m.n.) para adultos. También existen donativos especiales para grupos y escuelas. Entrada gratuita a personas discapacitadas, niños menores de 3 (tres) años, y a los Padrinos y Madrinas.
El copyright del artículo «Burrolandia México A.C. – Proyecto de Rescate del Burrito Mexicano», publicado en http://www.patadeperroblogdeviajes.com pertenece a Paula Ithurbide. Es necesario el consentimiento expreso de su autora para la publicación o reproducción, parcial o total, a través de medios impresos, online o a través de cualquier otro medio o formato.